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Aún el sexo anal en parejas heterosexuales es un tema tabú, un tema que cuesta hablar tanto con la pareja como con las amigas, pero cada vez es más frecuente que las mujeres se animen a incursionar en esto. En sus conclusiones los investigadores afirman que el presente estudio es el primero en proporcionar evidencia de que la saliva de una persona con faringitis gonocócica podría incrementar de forma sustancial el riesgo de gonococia rectal cuando la saliva de la persona con infección faríngea se utiliza como lubricante durante el sexo anal.b61ae186ae9e9cd457a8290951404e7f.jpg
Lo que destacan de estas fotos no son solo las chicas en sí, sino las poses que adoptan a la hora de tomarse las fotos. El sexo anal es una práctica de riesgo. Las técnicas más comunes incluyen tocar el orificio anal mientras se masturban manipulan los genitales propios de la pareja; estimular el ano de su pareja durante el coito, el método oral-genital.2144b9d149468c523f37b4d5af0fc1db.jpg
El sexo se hace con el cuerpo y con la mente, y así como el cuerpo necesita estímulos, la mente también: imágenes, pensamientos, tabúes, todo eso colabora a la hora de excitarse y de sostener una vida sexual que se escape un poco de la rutina, que como todo el mundo sabe es enemiga de la calentura.2144b9d149468c523f37b4d5af0fc1db.jpg
Recuerdo una escena de la pelнcula 'Un pez llamado Wanda', en la que uno de sus protagonistas inhalaba dentro de la bota de su pareja de juegos sexuales consiguiendo excitarse mбs aъn. Las fotos porno implican básicamente sexo explícito, es decir, chicas mujeres mostrándolo absolutamente todo.15595341995020.jpg
En un estudio que realizamos sobre la sexualidad de la mujer en 2014, de las más de 700 mujeres que participaron, con una media de edad de 26 años, ninguna señalo el sexo anal como más placentero que el coito como una forma de alcanzar el orgasmo, aunque un 34 por ciento de ellas indico que le gustaba que cree que le podría gustar el sexo anal”, explica el experto.14fe6506b89d566b0ad8224b325b55a3.jpg
Los resultados muestran que el uso de la saliva como lubricante para el sexo anal se asoció con un aumento de un 40% del riesgo de gonorrea rectal incluso tras ajustar por factores como la edad, el uso del preservativo durante el sexo anal receptivo, la infección por faringitis gonocócica y el estado serológico al VIH.
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